Os acompaño a cada una de vosotras y os llevo en Mi Corazón con tanta Paz. No os asustéis por lo que veáis y os suceda. Pero estad alerta por los engaños que son atentamente continuos.

Recread vuestra mirada en la Paz de Mi Corazón, recrearos sólo en Mí, por Mí para estar en Mí. Torpe el que se deja arrastrar. Inhumano por creencias, arrastráis a los demás, si no entráis en Mi Verdad, Rodead con Mis Brazos vuestro corazón y veréis cuánto os Amo. Rogad hijas. Sólo Yo valgo para llenarte. Sólo existe el perdón desde el Amor. Rodead con Mis Brazos y Mis Palabras vuestras mentes, pensamientos, deseos y elucubraciones, y sentiréis la seguridad que Yo doy al alma que procede de Mí para siempre. Sólo Yo os puedo llenar. Hay que dejarse hacer, que casi nunca lo hacéis. Al engañaros a vosotras mismas Me negáis a Mí.

Para comprender hay que saber, mirar sobre todo. En la observancia está el valor del conocimiento que más adelante puesto en práctica os da la sabiduría. Aprended a mirar constantemente a este Dios que os Ama. La observancia es mirar lo que Me pertenece. ¿Sabéis lo que Me pertenece? Vosotras.

No miréis al exterior sin Mí, os perderíais. Tomad Mis Palabras como el único conocimiento que tiene el ser humano.

Así seréis examinadas, según Mi Voluntad en vosotras. Dad importancia a la observancia en vuestras vidas y observaréis vuestro interior. Subid y bajad, permaneced y salid, pero todo desde Mí. ¿Qué es lo que sucede? Que esas situaciones no tienen valor, porque Yo soy absolutamente constante, y esos movimientos no serían reales porque estáis en Mí, por eso os digo que no os salgáis. Si lo hacéis veis lo opuesto a Mí, lo inexistente, no es verdad. La muerte del concepto de la existencia. Fuera de Mí no existe, eso es la muerte. Si la muerte la entendéis como el no estar aquí, no existencia, no es un concepto verdad. En Mi si siempre se està, siempre se vive.

Algún día cada una de estas palabras se publicarán y llegarán a los altares por Mi Voluntad.

Para Mí la verdad es vuestra (si Yo os la doy, es vuestra).

Esto es para toda la humanidad. ¿Seréis capaces de soportar el fuego de Mi Amor? A esto sólo se puede contestar con la alabanza al Padre, ¡Gloria al Padre!

Abriros a Mí, absorbed de Mi Corazón la Luz para que os penetre hasta lo más profundo de vuestras entrañas. Rogad para que esto suceda lo antes posible. Porque os necesito como no os podéis imaginar. Rogad para que no os apartéis de Mi Presencia, porque si no, no podría suceder, por muy ansioso que esté Mi Corazón. Rogad.

Cuántos no Me ven y Me confunden con placeres terrenales, y ahí no estoy Yo, no puedo entrar. No os alejéis. Os suplico que Me veáis en todo. Rogad por esto. Atended a las almas que Me necesitan a través de vosotras. Escuchad al Corazón que tanto os ama y os necesita. Poneros sobre Él y esperad en Mí. Rogad para que suceda la espera en vuestros corazones. Suplicad para que suban más almas a Mi Corazón. Sosegaros en el Mío, llenaros de Mí y encontraréis esa paz que algunas buscáis fuera de Mí en el mundo y jamás os llenará. Rogad a Mi Madre para que esto suceda. Ella cumple conmigo la misión de la Redención.

Sólo hay misiones apoyadas en Mí y reunidas en Mí y conmigo aprenderéis a hablar y callar, sin miedo ni expectativas, sin juicio, asentadas en Mí, porque os llevo como reinas en Mi Corazón. Dejaros que os inunde y veréis esa Paz que tanto anheláis. No juzguéis nunca, si vosotras no os juzgáis Yo tampoco, si no lo hacéis con los demás.

Sólo sirve saber que estoy ahí, no decir sólo “Señor, Señor”. Rogad por que esto suceda, sin rogar no hay escucha de vuestro Dios a vosotras. Rogar es abrirse con el corazón y ponerlo ante Mí. Rogad porque aprendáis a Amar. Rogad en la absoluta confianza, si el ruego no lo haces en confianza, no lo estás haciendo a nadie. En el ruego Dios se siente alabado por la confianza en Él. En el ruego de la confianza está la glorificación en plenitud, y eso es lo que os penetra conmigo. Sólo Yo os completo.

El desconocimiento os hace poseedoras del vacío. Esperad en la llenura, en Mí, y acabaréis completando la misión que os ha sido encomendada, sugerida por libertad, porque no es impuesta. Rogad porque suceda. Nada que se os pide es una petición de vacío, es conocimiento perpetuo de agasajo a la creación para recreo vuestro.

Si os completo es porque halléis vuestra libertad en esencia perfecta. Rogad.

La llenura del alma es una demanda continua y perpetua, pero en la libertad está vuestra decisión. Yo no puedo si no queréis. ¿Cómo podría obligar a alguien que no quiere? Aceptad Mi Libertad como Yo la vuestra, y Mi Libertad os implica por demanda de esencia a permanecer en Mí. Rogad vosotras.

Con estas peticiones se pueden hacer rosarios para llegar a Mi Corazón, unido en esencia al de Mi Madre. Llorad con el corazón cuando veáis que vuestro cuerpo y alma no recurre a su Dios para la ayuda que tanto necesita.

Yo he sido creado en esencia y en perfección en el Amor sin creación Divina, sino creado en el Ser por Sí. Siendo sólo Dios sin creación, crea.

Habréis de hacer un rosario de ruegos a Mi Corazón. Eso os lo encargo a las tres, y llenaréis Mi Corazón de gozo, porque será alabado en su justa medida. Por los confines del Universo se propagarán vuestras palabras por Mi Voluntad.

La llamada humana siempre lleva la vanagloria y mentira. Hay que luchar contra la llamada humana, es dura, difícil desde vosotras, desde Mí es placentero (explica: llamada humana es todo lo que os llama la atención y no está de acuerdo en Mí).

Querer saber de Mí es aprender, saber de Mí es conocer, y amar en Mí es la práctica del conocimiento. Pero sin Mi Escucha no podríais hacer nada.