Siempre estoy ahí, siempre estoy aquí. Vivo en vosotras, en cada una.
Mi cuerpo añora vivir siempre en el vuestro. Mi Cuerpo Santo, el Espíritu de Dios, unidos, la Santísima Trinidad. Es un espacio de vida que tomamos en cada alma y respirar en ella es la solución a vuestras penas. Quédate ahí y escucha. Respira en Mi. No lo dudes. Vivo con los ojos puestos en vuestra persona, en el alma de Mi Alma, en el ser que YO he creado. Toma la elección de elegirme siempre. Yo la añoro y es una alegría de felicidad, es el encuentro continuo. Es la escucha a un Dios que siempre Ama y ansía constantemente reunirse con el ser que ha creado en la inmensidad de Su Amor. Recogidas ahí nos abrazamos…..(pierdo palabras). Regocijaos porque esto es así.