Oración para la santificación de las almas del otro lado. El lema para este día: «La alegría en vuestros corazones». Yo Soy la alegría en vuestros corazones. Perdonaos, perdonaos. El perdón es la ausencia del mal. Reconciliaos, reconciliaos ( Puede ser para las almas que estuvieron aquí). Todo esto es el lema para estos días.
Todos buscáis amor. Para Mi el Amor es solo la Verdad.
El dolor parte de la creencia y esta está basada en la mentira (todas, y todas demandan). Están soportadas por otros, es como un espejo donde yo me miro y me veo en el otro, pero desde la mentira. Las creencias demandan sin comprensión y con malestar. Pero te exigen comprenderlas y ser feliz ¿Por qué si no estaríamos ahí? Porque la veo en el otro y es una imposición (hacer deporte, levantarse temprano, comer mucho….) todo es con arreglo a lo que hay, tu no razonas nada sino que te viene dado y aparentemente no lo puedes modificar: vivir en el campo no es rentable, por ejemplo. Abandonamos una elección de vida para entrar en un mundo de obligaciones para servir al ego del que mas manda, porque es rico, es el que implanta sus normas y tampoco se reconoce, viene de atrás su creencia de «tengo que ser el mejor». ¿el mejor de qué? ¿Quién soy en verdad? ¿Qué elijo?¿Qué deseo?¿Donde voy? Miro mis posibilidades y tomo conciencia. Es como el que quiere atravesar un desierto con el desconocimiento. Muere en el intento y digo muere porque en verdad no ha vivido, no ha existido, no era él. Que tenga conciencia de su pérdida, de su falta de elección. Llegar a una conciencia de verdad está mucho mas allá de la elección de tu propio ser. No aprendes por elección si esta está condicionada. Aprendes eligiendo sin condicionar, sin elegir, sin evitar las consecuencias. Yo aprendo.
Cuanta falta os hace el aprendizaje de la «libertad» que no tiene nada que ver con la libertad que conocemos. Para Mi la libertad es un aprendizaje, un estado de conciencia, un mirar en verdad, Tomarlo todo y abandonarlo. Volver a tomar y volver a dejar. Elegir y supeditar. Vivir y morir. Cuanto mas se hace más se va aprendiendo a ser libre en verdad, la libertad.
Cuantas almas hace falta que vivan esto para los demás, pero eso no interesa en la sociedad, solo seres maniatados para «servir» (no al hermano sino a la demanda del que esclaviza, la creencia sin personalizar).