Así es el mal. Destruye, aniquila al ser humano y no lo deja abandonar, Entrar en la verdad, ver la verdad, vivir en la verdad. Hablad, hablad de Mi, dejaros amar, comprended al hermano desde Mi, no rechacéis la mano tendida, os necesita y Yo estoy ahí. El hermano habla, clama: » necesito de ti», pero el ser humano, el que se cree algo, le responde: yo no soy nadie, no tengo qué darte, espera ya te llegará. La ayuda se da inmediata, acogida y con el respeto que produce el amor, alegría (es el resultado).

Tomo el remanso de Paz del Corazón de Mi Hijo y os introduzco a las tres en El, con un sosiego especial, por un camino de perdición ya superado. Rompo las cadenas que os atan, que os han atado por vuestras peticiones en el Rosario y os elevo hasta el séptimo cielo. Gloria Santificada e increada por Mi. Es el remanso de Paz de algunos santos que Yo permito que disfruten de este lugar en espacios que Yo solo conozco. Espacios albergados por santos muy especiales, remansados en una Presencia muy especial de Mi Padre, es el conjunto perfecto de La Trinidad. Cuando hablo permito que Mi Espíritu Santo, muy especialmente, arroje sobre  vosotras la luz, la paz y ese sosiego que os impresiona, pero que sepáis que es Mío, para afrontar las cosas desde Mi, no desde vosotras, y eso os hace mayores, meritorias de ese cielo tan elevado. Es Mi Voluntad y por eso lo hablo.

Por eso te he elegido, sé que puedo confiar en vosotras y confío, porque sé de vuestra fragilidad, vuestra apertura a Mi Corazón y por el ansia de conocerme. Ese es vuestro bagaje espiritual. Yo en vosotras, reconocedme así. El Amado junto a su amada y el corazón fundido en el mismo Amor. Solo Yo.

Si el estado de conciencia equivale a la apertura de nuestro corazón a Su Presencia, derrama en vosotras tales Gracias que nuestra comprensión amplía conocimientos anteriormente inimaginados. El estado de conciencia es un grado de comprensión y esto llega cuando tu abres el corazón a Su Presencia.

El Padre: Canción de Amor perpetuo. Os confío todas Mis necesidades puestas en Mis criaturas y engrandezco vuestros corazones para llenarlo…(se pierden algunas palagras) y el sacrificio que ofrecéis en cada momento, no es de sufrimiento el sacrificio, es el de saberse entregada a un Dios, ¿ Comprendéis?. Solo amar en la alegría y confiadas al Amor, eso es todo, Soy Yo. (M.J. ve una ráfaga de luz).