Solo sosegadas esperando Mi venida, es el resurgir de su alma en el encuentro con el Amado. Tomad el Corazòn, nuestros corazones, deseosos de encontraros felices sabiendo que Soy Yo el Dador de la felicidad….. ( me pierdo). Esperad y vereis cuanto Os Amo, esperad y vereis lo que hago en vosotras y en los demás y sabréis de Mi por la escucha de Mi Palabra.

El temor aparta, ata al esclavo, lo subyuga para entrar en sus propias necesidades sin saber que se esconde de la Verdad, vive en el desasosiego y en la pèrdida de su alma. Son almas incontinentes que entran en el desapego de su propio ser, sin saber que son Amadas en profundidad por un Dios.

Esperad almas Mias muy queridas en el sosiego de Mi Venida. Nadie es merecedor de nada. Yo Soy el dador de todo. El que sabe de Mi habla de Mi, solo eso.

Si os sintierais movidas por Mi, ¿ donde iríais?; ¿ obedeceríais donde Yo os pidiera?; ¿ teneis confianza para escucharme?.