( El Señor nos habla así): ¿Cuál es tu postura ante la vida? ¿Quién Soy Yo para ti? ¿Para Mi quién eres tu? Calla y aprende. Rocíame con la voz de tu escucha, enseñándome a mirar, enseñándome a aprender a dar locuazmente con Tu Palabra. Rocíame con Tu Amor, enseñando a los demás a sentirse amados, tomando lo que se te da , sabiendo discernir lo que es tuyo, lo que te pertenece. ( El Señor formula esta petición por nosotras y para nosotras. Para todos).