Vinimos puros al mundo, en esencia de perfección, y sin saber. Lo primero que entró fue el miedo, el temor. Miraos a vosotras ( El Señor dice que todo es miedo).
Muero por el Amor de Mi Amor: y El responde, muero por ti.
Cuantas almas Me necesitan y no Me ven.
Suplicad porque el cielo entero alabe al Señor cuando sus almas miren a otro lado.